OMS - Más del 90% de las enfermedades

tienen un origen emocional

La Organización Mundial de la Salud (OMS)

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha destacado repetidamente la conexión entre las emociones y la salud física, señalando que más del 90% de las enfermedades tienen su origen en aspectos emocionales. Esta perspectiva refleja la comprensión cada vez mayor de que el bienestar emocional es fundamental para la salud general de una persona.


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Si reprogramas tu mente cambias tu vida

Tu subconciente crea tu realidad

Entender la importancia del subconsciente en nuestra salud emocional y física es fundamental para alcanzar un bienestar integral. El subconsciente, esa parte profunda de nuestra mente que opera por debajo del nivel de conciencia, desempeña un papel crucial en la forma en que experimentamos el mundo, nos relacionamos con nosotros mismos y respondemos a los desafíos de la vida.

Nuestro subconsciente almacena no solo recuerdos y experiencias pasadas, sino también creencias, patrones de pensamiento y emociones arraigadas que han sido internalizadas a lo largo del tiempo. Estos elementos pueden influir poderosamente en nuestras percepciones, decisiones y comportamientos, moldeando así nuestra realidad diaria.

En el ámbito de la salud emocional, el subconsciente puede ser un terreno fértil para la gestión y liberación de emociones reprimidas, traumas no resueltos y patrones negativos de pensamiento. Muchas veces, los desafíos emocionales persistentes, como la ansiedad, la depresión o el estrés crónico, tienen raíces profundas en el subconsciente, y abordar estas raíces es esencial para lograr una verdadera sanación emocional.


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Explorando el Legado Invisible

Cómo las Experiencias del Pasado Impactan Nuestro Presente

En la travesía de la vida, enfrentamos una amalgama de experiencias, emociones y dolores que a menudo atribuimos a nuestras vivencias personales. Sin embargo, una perspectiva más profunda nos invita a considerar que no todo lo que experimentamos es exclusivamente nuestro. Más bien, puede ser el eco de vidas pasadas, el legado de nuestros antepasados o incluso las vibraciones de nuestro entorno. Este intrigante concepto arroja luz sobre la complejidad de nuestra existencia y nos impulsa a explorar más allá de las fronteras de nuestra individualidad.

Herencias Ancestrales: La Carga del Pasado

Los lazos que nos unen a nuestros antepasados trascienden la línea del tiempo, y con ellos, llevamos consigo no solo sus triunfos, sino también sus luchas y sufrimientos. Investigaciones en epigenética han sugerido que las experiencias de nuestros antepasados pueden dejar una marca en nuestros genes, influyendo en nuestra salud y bienestar. Así, los traumas no resueltos o las emociones no expresadas de generaciones pasadas pueden resonar en nuestras vidas, manifestándose de formas sorprendentes.

El Hilo de las Vidas Pasadas: El Karma en Acción

La noción de reencarnación ha sido un pilar en muchas tradiciones espirituales y filosóficas, sugiriendo que nuestras almas atraviesan múltiples existencias para aprender y evolucionar. En este contexto, las experiencias y relaciones de nuestras vidas pasadas pueden tejerse en el tapiz de nuestro presente, influyendo en nuestras elecciones, relaciones y desafíos actuales. La idea de que estamos atados a un ciclo de causa y efecto, donde nuestras acciones pasadas dan forma a nuestro destino presente, añade una dimensión fascinante a nuestra comprensión de la vida.

El Eco del Entorno: Sensibilidades Ambientales

Nuestro entorno físico y social también juega un papel crucial en nuestra experiencia humana. Los estudios han demostrado cómo el estrés, la violencia o la toxicidad ambiental pueden afectar profundamente nuestra salud mental y física. En un mundo interconectado, absorbemos no solo los elementos tangibles de nuestro entorno, sino también sus energías sutiles. Así, las emociones y tensiones presentes en nuestra comunidad o incluso en el mundo global pueden resonar en nuestro ser, moldeando nuestras percepciones y respuestas.



Navegando en las Aguas de la Conciencia

A medida que exploramos estas perspectivas, surge una pregunta fundamental: ¿cómo podemos reconciliar estas influencias aparentemente externas con nuestra experiencia personal? La clave puede residir en el cultivo de la conciencia y la aceptación. Al reconocer la interconexión de todas las cosas, podemos abrazar nuestra experiencia con compasión y entendimiento. Al hacerlo, no solo liberamos el peso de la culpa o la responsabilidad exclusiva, sino que también abrimos la puerta a la sanación y la transformación.

El Subconsciente: El Repositorio de Nuestro Ser

Todo lo que experimentamos, desde lo más superficial hasta lo más profundo, encuentra su hogar en las profundidades de nuestro subconsciente. Es aquí donde se almacenan las impresiones de nuestras vidas pasadas, los ecos de nuestras conexiones ancestrales y las resonancias de nuestro entorno. A través del trabajo consciente y la exploración interior, podemos acceder a este vasto repositorio de experiencias y encontrar la claridad y la comprensión que buscamos.

En última instancia, nuestro viaje a través del tiempo y el espacio es un misterio profundamente personal y colectivo. Al explorar las raíces de nuestras experiencias, podemos expandir nuestra percepción de la realidad y encontrar un mayor sentido de conexión con el universo. En este viaje hacia la comprensión más profunda, descubrimos que no estamos solos en nuestra travesía, sino que estamos entrelazados en la vasta red de la existencia, llevando consigo el legado de aquellos que vinieron antes y las vibraciones de nuestro entorno presente.

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